Cómo hablar con fluidez en inglés – Sin Inteligencia Artificial
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La clave para hablar con fluidez en inglés está en dejar de estudiar inglés como si fueras un robot y comenzar a comunicarte como un ser humano.
Es decir, si fueras un robot, te valdría con memorizar y almacenar datos y después, con una fórmula, aplicar esos datos. Pero… siento decirte que no eres un robot.
Ya que no eres un robot de Inteligencia Artificial para aprender inglés, te sigo contando cómo conseguir fluidez para hablar inglés: aplicando técnicas de neurociencia.
Tus bloqueos con el inglés desaparecen cuando das a tu cerebro lo que necesita en el momento oportuno.
Si no, seguirás pareciendo un robot cada vez que te pones a hablar inglés.
Habla inglés con fluidez dejando de "estudiar" inglés
La sociedad ha avanzado mucho en distintos aspectos, ¿no crees?
- Tenemos trabajos cada vez más exigentes.
- La vida nos pide que tengamos una mayor y mejor calidad de vida.
- Los avances en tecnología han abierto el mundo a una posibilidad de comunicación con personas desde cualquier punto del planeta.
- Viajamos más y con más comodidad por todo el mundo.
Podría seguir enumerando muchas más, ¡la lista sería larguísima!
Para todas ellas, el inglés es indispensable. Directa o indirectamente, el inglés siempre está en todo lo que nos rodea en la sociedad.
Y no vale con tener un nivel intermedio o alto, eso ya no es suficiente. Porque…
- ser el único que no habla con fluidez en una reunión de trabajo te hace sentir ridículo.
- salir de viaje y no poder entenderte con la gente local te da mucha rabia.
- ponerte una serie en Netflix en versión original y no entender ni dos palabras seguidas.
Y es que, el nivel académico de inglés no tiene nada que ver con la fluidez.
¿Cómo que no tiene nada que ver?
Por lógica, a más nivel de inglés, mayor fluidez, ¿no?
Para que lo puedas ver más claro, para tu cerebro «estudiar inglés» es como «leer las instrucciones de tu nuevo teléfono móvil» (aunque… ¿quién se lee aún las instrucciones del móvil? – yo solo conozco una persona, mi padre. jajajaja…)
Tú coges el librito de instrucciones y lees:
- Los botones
- El menú
- La cámara frontal
- La cámara trasera
- Etc.
Decides leerlo varias veces para tenerlo todo claro. Incluso, el libro lleva dibujitos que te ayudarán a comprenderlo mejor.
Después, coges el móvil, ves los botones, el menú, la cámara… Todo estaba ahí, como decían las instrucciones.
Llega el momento de utilizar el móvil y quieres descargar un vídeo que te han enviado. Lo descargas y… ¿dónde se ha almacenado?
Probablemente lo leíste en las instrucciones, pero ¿eres capaz de acordarte de los pasos que dar para llegar al almacenamiento de descargas?
Si ya has utilizado otros móviles, posiblemente sí.
Pero si no es así, ¿no sería complicado tras haber comprendido correctamente las instrucciones encontrar lo que quieres en ese momento sin ponerte a investigar un poco por el móvil? (Siempre puedes usar la opción de buscador rápido en el móvil – pero esto no funciona así en tu cerebro).
¿Y qué tiene que ver las instrucciones del móvil con el inglés?
Es una metáfora en la que las instrucciones son las palabras de vocabulario y las reglas de gramática.
Puedes seguir leyendo instrucciones más complejas, buscar accesos rápidos por internet específicos para la marca de tu móvil.
Pero…
¿Qué pasa si las palabras y expresiones que necesitas en inglés no aparecen en tu mente cuando lo necesitas?
Si sigues estudiando inglés general, perderás mucho tiempo estudiando cosas que nunca utilizarás. Y puede que nunca llegues a aprender aquello que sí vas a utilizar porque esté «en un nivel superior».
Y, ¿no terminas, al final, utilizando normalmente las mismas aplicaciones en el móvil?
Aprendiendo esas, ya puedes utilizar tu móvil para lo que de verdad lo quieres. ¡Haz lo mismo con tu inglés!
Aprende lo que vas a utilizar, esto hará que consigas comunicarte con naturalidad en cualquier situación.
¿Es la Inteligencia Artificial para aprender inglés una revolución?
La Inteligencia Artificial está cada vez más presente en nuestro día a día. Pero, ¿te puede ayudar a conseguir fluidez en inglés?
Tú sabes mejor que nadie que, a veces, te resulta complicado centrarte en lo que realmente necesitas. Y, si estás leyendo esto es porque quieres comunicarte con naturalidad en inglés.
Y, tal vez te has formado la idea en tu mente de que “el inglés es demasiado complicado”.
Y es que, a todos nos gustan las cosas sencillas, cuando algo nos resulta demasiado complicado, no consigues recordarlo con facilidad, o lo abandonamos, ¿te pasa a ti?
Pues algo así te puede estar pasando con el inglés: se nubla en tu mente y no consigues utilizarlo como te gustaría.
¿Por qué no consigo hablar inglés con fluidez?
Porque tu cerebro ve el inglés como algo complejo, algo que no logra conectar con la información que ya tiene almacenada.
A mí me gusta simplificar (y a tu cerebro también), ir al grano, a lo que de verdad necesitas y vas a utilizar. Por eso te recomiendo que te centres en tus necesidades reales.
Cuando hablamos de inteligencia artificial para hablar inglés con fluidez pensamos: ¡Ay, qué fácil! Un robot piensa por mí y puedo aprender inglés de forma fácil y rápida.
Puede que no veas difícil aprender las reglas gramaticales, tienen sentido, las memorizas, haces ejercicios… ¿Para qué vas a encontrar otra forma de hacerlo?
Eres humano, tu aliado es tu cerebro, no la inteligencia artificial para aprender a hablar inglés con fluidez
Verás, tu cerebro no transforma reglas gramaticales en comunicación, por lo que terminas, de verdad, pareciendo «un – ro-bot – cu-an-do – ha-blas – in-glés».
¿Por qué sucede así y no consigo fluidez en inglés?
Porque estás memorizando, no estás aprendiendo a utilizarlo.
Por muchos ejercicios que hagas de rellenar huecos, ese no es su uso real, es un uso controlado y puede que tu cerebro no le vea el sentido a la hora de comunicarte fuera de esos huecos en blanco de los ejercicios.
Y es que, en la vida real no vas completando frases, tienes que expresar la idea completa.
Pues bien, analizando el lenguaje que utilizas en tu día a día, cómo te expresas y qué ideas te vienen a la mente, te llevará mucho más rápido a conseguir hablar con fluidez.
Así dejarás de sentir que no avanzas por culpa de la pronunciación, de que no sabes suficiente vocabulario, de que se te olvida aplicar las reglas gramaticales en el momento correcto…
Al final, se trata de centrarte en tus necesidades reales, dárselas a tu cerebro cuando las necesita y aplicarlo para comunicarte en inglés.
Esto ya lo hace todo más simple: No es magia, es neurociencia.
>> Ver vídeo: Cómo utilizar la Inteligencia Artificial a tu favor para practicar inglés <<
Los 3 errores que te impiden comunicarte con fluidez en inglés
Y hay tres errores (con sus soluciones) que la mayoría de las personas comenten cuando quieren conseguir fluidez en inglés.
Esos 3 errores los explico en detalle en esta video-clase, ¡verás como todo tiene más sentido!
5 mitos sobre hablar inglés con naturalidad
Los mitos son esas creencias “populares” que no siempre son las más acertadas. Y sobre el inglés, hay muuuuchos mitos.
La razón principal de esto es que: hay tantos métodos como personas en el mundo.
Podríamos decir que cada persona necesita una forma específica de aprender inglés
No todos tenemos las mismas experiencias, ni el mismo ritmo de vida, ni las mismas motivaciones y, sobre todo, distintos estilos de aprendizaje. Por esto, no es posible encontrar un método que ayude a todas las personas por igual.
En mis mentorías de inglés tratamos a cada persona individualmente para conseguir su ruta ideal para conseguir hablar inglés con fluidez en el menor tiempo posible.
Ahora, vamos a destacar los 5 mitos más importantes:
Mito 1: Para conseguir fluidez en inglés, hay que irse a vivir al extranjero durante un tiempo.
¿Sabes por qué es un mito? Porque si lo piensas, ¿no hay muchos extranjeros viviendo en España y no se comunican con fluidez?
Imagínate a ti mismo, yendo a un país de habla inglesa y, de repente, tener que hablar inglés sin parar. ¿No te frustraría no conseguir decir lo que realmente quieres decir?
Pues esto seguiría bloqueándote. Porque no le vale a todo el mundo lo mismo.
Sobre todo, si lo que está ocurriendo es que te bloqueas o estás estancado. Algo está pasando en tu cerebro para que no fluya.
Y te lo digo, no porque me lo saque debajo de la manga, si no porque he tenido muchos alumnos que, aún viviendo muchos años en un país de habla inglesa, no conseguían comunicarse en inglés.
Mito 2: Puedes encontrar todo lo que necesitas gratis por internet.
¿Es esto cierto? Hay mucha información por internet, pero… ¡¿Qué es lo que tú necesitas?!
¿Ir de página en página viendo si algo te sirve?
¿No poder practicar y que te ayuden a sacar lo mejor de ti mismo?
¿Que no encuentres motivación en cosas aisladas por internet?
Internet es una fuente de información, pero no es un guía o profesor. No te enseña, solo te muestra ejercicios, consejos y datos.
Esto, difícilmente va a desbloquear tu inglés, ¿no crees?
Mito 3: Soy de ciencias, y las letras no son lo mío, por eso no aprendo inglés.
Esta sí que es buena, como si nadie de ciencias hubiera conseguido comunicarse con fluidez en algún idioma extranjero.
El ser de ciencias puede utilizarse a tu favor para mejorar tu inglés, no es un obstáculo. Cuando hablo de “estilos de aprendizaje”, precisamente, este es uno de los más característicos.
Así que, deja de esconderte detrás de las ciencias y utilizarlas a tu favor para mejorar tu inglés. Esto, además, te motivará muchísimo más.
Mito 4: Para tener fluidez necesito un nivel muy alto de inglés.
Lamento decirte que la fluidez no depende del nivel de inglés, no. Y es que, el nivel mide conocimientos y la fluidez mide la soltura.
La fluidez es la que realmente te ayudará a comunicarte con otras personas, no tu nivel. El no bloquearte, no quedarte en blanco, que el idioma que sabes (aunque sea poco) aparezca cuando lo necesitas…
Hay personas a las que se les da bien estudiar, pueden conseguir certificados de inglés de niveles avanzados. Sin embargo, las palabras no fluyen cuando las necesitan.
Y esto puede deberse a que el inglés que han aprendido, lo han almacenado en un lugar en su cerebro que no es el del uso cotidiano.
Si este es tu caso, el desbloqueo puede consistir en colocar todo lo que ya sabes en el lugar correcto en el cerebro, para que aparezca cuando lo necesitas.
Mito 5: Para hablar con naturalidad en inglés necesito dedicarle mucho tiempo.
Quizás te estás diciendo a ti mismo que no tienes tiempo y que por eso no consigues comunicarte.
Si es así, entonces déjame preguntarte: ¿Cuánto tiempo crees que necesitas conseguir comunicarte en inglés con naturalidad y olvidar al robot que hay en ti?
Anota una cifra en un trozo de papel, un tiempo exacto, ¿cuántos días, meses, años…?
Vamos, arriésgate, pon un tiempo exacto 😉
Esta es una de las preguntas que más me suelen hacer: ¿Cuánto tiempo necesitaré para conseguir comunicarme en inglés con fluidez?
El tiempo es relativo, o eso decía Einstein. Yo estoy de acuerdo en esta afirmación, sin duda.
Cuando estoy esperando a que me atiendan en la sala de espera del dentista, el tiempo parece no pasar. Miras el reloj una y otra vez ¿en serio solo han pasado 3 minutos?
Sin embargo, cuando estás de comida con los amigos… ¿ya son las siete de la tarde? ¡Se me ha pasado volando!
Pero, desde mi punto de vista, hay veces que necesitamos algo más concreto.
O qué pensarías si me preguntas: María, ¿en cuanto tiempo comenzaré a comunicarme con soltura en inglés?
Y que yo respondiera: mira, el tiempo es relativo. ¿Qué más da cuánto tardes? Simplemente disfruta el proceso.
Con esta respuesta, puede que no llegues a poder planificarte, a poder ponerte unos objetivos.
Aplicando las técnicas correctas que tú necesitas, puedes conseguirlo en cuestión de semanas o como mucho, algunos meses.
Así que, céntrate en ti, en lo que realmente necesitas. ¡Esto es lo importante!
Cómo corregir tus errores más frecuentes
Uno de los miedos más frecuentes al hablar inglés con los que me he encontrado es: el miedo a equivocarse o a decir alguna “barbaridad”.
Es muy importante comenzar a trabajar este miedo, porque, al final, todos necesitamos equivocarnos para avanzar. Pero claro, esto parece más fácil decirlo que hacerlo.
Desde que comenzamos a aprender inglés, se nos ha ido corrigiendo, diciendo lo que es correcto o no. No se solía prestar atención a si, al menos, nos estábamos comunicando o haciendo entender.
Esto es lo que nos lleva a tener fluidez, el soltarnos, el no sobre-analizar cada cosa que decimos.
Con esto en mente, si uno de tus miedos sigue siendo el “no cometer errores”, te recomiendo que veas esta video-clase en la que Mª Jose nos explica algunos errores comunes que puedes corregir fácilmente.
